El concepto “techo de cristal” no es nada nuevo. Surgió en 1978 cuando la consultora de negocios, Marilyn Loden, argumentó que las mujeres no ascendíamos por una cultura que obstruye nuestras aspiraciones y no fomenta una equidad en oportunidades. Más de 40 años después, parece que nada ha pasado pues seguimos viendo una falta de equidad de género enorme.
Por ello han surgido campañas como la de Linkedin –Contemos con más mujeres- con la intención de amplificar nuestra voz y alentarnos a unirnos a la conversación sobre las barreras que tenemos para estar en puestos de liderazgo. Porque en México, solo 4 de 10 mujeres ocupan cargos directivos. También está Bumble Bizz, en la que nosotras damos el primer paso para iniciar la conversación con alguien que se puede convertir en nuestro próximo colaborador. En fin, hay muchísimas campañas y marcas que se han sumado a la conversación, pero no es suficiente. La frustración es generalizada así que empieza a creer en ti y prepárate porque nadie más lo hará por ti.
5 tips para romper el techo de cristal
Busca mentorías – acércate a mujeres que te inspiren y pídeles consejos para crecer profesionalmente. Te pueden ayudar con herramientas, contactos y hasta te pueden dar retroalimentación. Lo importante es que seas receptiva, recuerda que nada es personal.
Ve de los errores una oportunidad – en lugar de quejarte y ser tan exigente contigo, conviértete en observadora. Dale la vuelta a tus errores y busca la manera de buscar una solución con firmeza. ¡Es de valientes!
No es competencia – querer buscar un mejor puesto no significa competir en contra de los hombres, recuerda que la igualdad de género es inclusión. Así que apoya a todos y déjate ayudar, no se trata de intimidar. Si estás lo suficientemente preparada, lo puedes lograr.
Haz conexiones – el networking es de las herramientas más poderosas. Tus conocidos se pueden convertir en tus sponsors, que hablen bien de ti es una de las mejores referencias. Así que trabaja en tu liderazgo y olvídate de la pena.
Crea una red de apoyo – sí, lamentablemente tener un puesto de liderazgo implica dedicar un poco más de tiempo a tu trabajo. En caso de ser mamá, ten un grupo de gente cercana a la que sabes que le puedes confiar y marcar cuando más lo necesites. Tener el apoyo de tu pareja es de lo más importante, la admiración mutua es un pilar en cualquier relación.